jueves, 15 de noviembre de 2012

Hello there.
Ya ni me acuerdo sinceramente cuando fue la ultima vez que escribi acá. Creo que ya se me pasó esto de relatar mi vida o parte de ella en una página de internet, y aparte de eso nunca fui muy buena para escribir o expresarme. Anyway, sé que nadie va a leer esto sino hasta dentro de un buen tiempo (o quizás nunca) lo que hace que esto sea como un diario secreto... Tiene su ''esencia'', ¿no?
Entré acá porque mientras venía volviendo a casa me puse a pensar que desde hace tiempo no comparto ninguna charla con nadie respecto a mi vida. En pocas palabras, nadie está al tanto de mi vida.
Así es que, recordé que antes escribía todo acá, en mi blog... por lo tanto, voy a contar un poco cómo van las cosas...
Honestamente y sin vueltas, no me siento bien. Las cosas no me están saliendo como yo quiero. Cada vez estoy más sola y eso me frustra.
Primer punto:  No es fácil levantarse y ver la misma imagen de todos los días en el espejo. Bien, convengamos que nunca en mi vida (ni siquiera de más chica) estuve conforme con mi cuerpo. Y creo que nunca lo voy a estar. Es feo ir a comprarse un vestido que te gusta, y cuando te lo ves puesto, no te queda como esperabas... mamá dice, ¿a ver como te queda? Y vos no queres que te vean por nada del mundo. Que la vendedora te mire con cara de asco y diga ''mmm no, podemos buscar otra opción'' (y no es joda). No es nada lindo salir llorando del probador. No es fácil ir a comprarte ropa y ver que cada puta prenda te quede como el ojete, mientras tanto otras chicas de la edad tienen cuerpos perfectos (y ojo, sin hacer deporte ni nada, aaalgo así como que nacen tocadas por una varita mágica, ¿no?) Y vos te quedás de cara, y empezás a pensar ''¿porqué no tengo YO ese cuerpo?'' ''¿porqué me tocó esto a MI?'' porque esa remera/musculosa/pantalón que tanto te gustaba y que viste en la vidriera, o te marca los defectos que ni tenés o te hace más plana de lo que sos... y ahí es cuando pensás ''tengo que dejar de comer tanto''... pero llegás a tu casa y te bajoneás, y buscás consuelo en alguna galletita o alfajor... acto seguido pensás, qué idiota!! ¿Qué acabo de hacer? Y esta obsesión te empieza a llevar a hacer cosas de las que después te arrepentís...  Cuando le contás a alguien esto, te dicen ''no seas boluda! si sos flaca vos! y te empiezan a fastidiar... Mamá y papá dicen, ''porqué no comes?, no vengas con pelotudeces!'' Pero ellos no lo entienden...
Bueno, imaginen pasar por eso 20 veces al día.

I wanna die

No hay comentarios.:

Publicar un comentario